Tumba al Soldado Desconocido

La tumba al soldado desconocido es un homenaje de carácter multinacional que se lleva a cabo por medio de monumentos erigidos por las naciones para honrar a sus soldados muertos durante la guerra, sin haber podido ser identificados. Estos tipos de monumentos mausoleos tienen la finalidad de conmemorar a los caídos anónimos en importantes contiendas, aunque en cuanto al anonimato del soldado fallecido gracias a los avances en las identificaciones por el ADN, será cada vez más inusual. 

El primer memorial conocido se sucedió en Dinamarca al terminar la 1ª Guerra de Schelswing (1849), en homenaje al Landsoldaten (soldado de la Infantería), a posteriori en 1866 fue celebrado en EEUU por su cruda e histórica Guerra Civil.

Aunque la idea de honrar a los soldados caídos en el frente de  La Primera Guerra Mundial nace en 1916 en París propuesto por el presidente de la Memoria francesa, no se lleva a buen puerto hasta 1921 hasta ubicar el monumento bajo el famoso Arco del Triunfo de París. Por lo que en realidad donde surge como tradición anual, es en el Reino Unido al acabar la Gran guerra en 1920, llevando a otras naciones a seguir su ejemplo. 

En Moscú (Rusia) su tumba erigida en el Parque Alexander, frente al Kremlin, constituye uno de los actos más solemnes que se dedica a los soldados soviéticos caídos durante la Gran Guerra Patria contra la Alemania nazi en 1941, celebrándose la caída de Berlín en 1945 por el Ejército Rojo. La entonces URSS fue el país que más muertos puso en la contienda.

Este 9 de mayo por primera vez en su historia debido al Covid-19, Rusia ha celebrado su 75 aniversario de la victoria sobre la Alemania nazi sin sus apoteósicos desfiles sobre la Plaza Roja, velado a pequeños actos significativos.

En España se conoce dos monumentos:

El polémico Valle de los Caídos, también conocido por el nombre de La Abadía Benedictina de la Santa Cruz del Valle de los Caídos. Situado en Madrid en San Lorenzo de El Escorial dentro del sistema montañoso de La Sierra de Guadarrama. Es un conjunto monumental cementerio mandado a construir por el entonces General Francisco Franco entre los años 1940-58 como un modo de rendir homenaje a los combatientes caídos del bando nacional o sublevados, además de personajes importantes de la Falange como su fundador José Antonio Primo de Rivera. Tiempo después desde 1959, como gesto de buena voluntad se decide trasladar restos de miles de soldados republicanos muchos sin identificar, para recibir sepultura en el lugar y sin consentimiento familiar. La excusa fue de que este lugar fuera un mausoleo de la concordia, una muestra de perdón y con ello también apaciguar la crítica de una parte de la Iglesia y de un lavado de cara de tratar de generar un clima de política exterior reconciliadora. Clasificada por el poder dictatorial de “todos muertos por España y por la Patria”. Habiendo estado casi 44 años en el lugar, aplicándose la Ley de Memoria Histórica, desde el 24 de octubre del 2019 los restos mortales del dictador Franco fueron extraídos del Valle de los Caídos y trasladados al cementerio de El Pardo-Mingorrubio.

La enorme Cruz hecha de hormigón y cemento es la más grande del mundo cristiano (150 metros de altura y 260 metros de longitud, respectivamente). Pesa unas 200 toneladas y su interior es tan espacioso que alberga una escalera de caracol y un ascensor desde su base hasta la altura de sus brazos. A los pies la Cruz se erigen cuatro esculturas de los 4 evangelistas bíblicos en piedra caliza de unos 18 m. Al lado la foto de la escultura La Piedad, del mismo tamaño y construida por el mismo material que los evangelistas, y que se hallan muy dañadas.

Familiares afectados llevan una lucha ardua en los tribunales y no tan sólo por querer exhumar los cuerpos y pudieran lograrse la identificación y poderlos enterrar dignamente. Sino del trágico hecho de numerosos casos en que fueron enterrados verdugos con sus víctimas fusilados, cuales no fueron ni siquiera combatientes durante el enfrentamiento sino apresados en sus hogares. Y en donde en nuestros días se resuelven sus casos en los tribunales tras arduas reclamaciones. 

El mausoleo con la impresionante basílica subterránea con numerosos pasillos y la Cruz, fue un trabajo faraónico al que se incorporó numerosas bellas estatuas.

La inmensa mayoría de la mano de obra que construyó el mausoleo fueron presos republicanos cuales trabajaron como esclavos y de los que muchos perecieron en la penosa labor.

El otro monumento situado en Madrid en La Plaza de la Lealtad junto al Paseo del Prado, es el Monumento a los Caídos por España inaugurado el 2 de mayo de 1840. Antes de 1985 se lo llamó Obelisco a los Héroes del 2 de Mayo, y se erigió para vanagloriar a los fusilados durante la ocupación francesa en España en la fecha que ocurre el levantamiento popular tras el motín de Aranjuez. El monumento tiene 5,6 m. de largo y en su base lleva una llama permanentemente encendida donde reza la inscripción en letras doradas: "HONOR A TODOS LOS QUE DIERON SU VIDA POR ESPAÑA".