jueves, 7 de mayo de 2020

Segundo viaje de Colón (1493-1496), y su paso por Canarias.

Aunque Colón no había encontrado las preciadas especies y la seda, si hallaron oro y piedras preciosas en abundancia de su contacto con las tribus locales de la isla de La Española, sumando todo tipo de objetos culturales e incluso animales y plantas exóticas, incluso llevando a 10 indígenas; dos de ellos hijos del propio cacique aliado Guacanagarí. Todo ello renueva la confianza de los Reyes Católicos que se deciden, con más entusiasmo, financiar la expedición. 

Representación de Colón -conocido también por los nombres Cristoforo Colombo (en italiano), o Christophorus Columbus (en latín)-, en la Corte ante la reina Isabel I de Castilla, pintado por Vve. Turgis entre los años 1840-1850.

En realidad fueron unas excelentes noticias para dejar la ruta tradicional que conllevaba el siempre al acecho, peligro islamista. Portugal iba ganando la partida, sus navegantes habían realizado importantes expediciones por las costas del sur de África. Años después conseguirían pasar por el Cabo de Buena Esperanza, llegando en 1498 a la India. El Tratado de Tordesillas que llegó en 1494, fue decisivo para el reparto de las zonas de navegación y derechos de conquista de los territorios descubiertos, tanto en África como el Nuevo Mundo, y sirvió para evitar futuros conflictos. Los Reyes Católicos contaba además con el beneplácito de La Sede papal, otorgándoles el papa Alejandro VI, de ascendencia española, las llamadas Bulas alejandrinas, emitidas en 1493 autorizando a la corona castellana-aragonesa el derecho de la adquisición del territorio descubierto y a descubrir en las Indias, pero con la obligación de evangelizarlos. 
La aventura hacia Las Indias -continuando el almirante creyendo que se hallaba en el mar de Asia y que poco camino quedaba para conseguir llegar a Japón llamada en aquella época Cipango, país que se creía que era el origen de todas las especies y piedras preciosas-, comienza partiendo desde Cádiz el 25 septiembre de 1493 con 17 navíos, y con 2500 hombres, una considerable cantidad comparados a los que tuvo en su primer viaje. Se dirigió, rumbo en primera instancia como en todos sus viajes a Canarias para aprovechar los vientos de empuje del Este. Hace escala en la capital de Gran Canaria el 2 de octubre, y entre la variedad de provisiones embarca esquejes de caña de azúcar para su posterior arraigo en las tierras descubiertas, o por descubrir.
Llega a La Gomera (5-6 de octubre), para continuar tomando provisiones, y llevar ganado (ovejas, vacas, cerdos…), para la crianza principalmente en la isla descubierta en el primer viaje, La Española. El día 7 de octubre parte de La Gomera, habiendo permaneciendo dos días, y parece que efectuó una breve escala en la isla de El Hierro el 13 de octubre, día que emprenden la definitiva travesía hacia Las Indias. Los animales debieron ocupar la cubierta, puesto que en la bodega no hubieran sobrevivido por las penalidades del duro viaje. 
Fueron en muchísimas mejores condiciones que en su anterior viaje, disponiendo de una flota de 17 navíos, de los que 5 eran Naos, y 12 carabelas de armas como La Niña, que fue la única que repitió el viaje. Viajan dos hermanos de Colón, Diego y Bartolomé, y figuras tan importantes como Juan de la Cosa, Pedro de las Casas, Juan Ponce de León, etc. Destaca que parte de la tripulación la compusieron isleños nativos. 
Rumbo a Las Indias la idea inicial era llegar a la isla de La Española para reabastecer la isla y proseguir con la tarea evangelizadora y colonizadora, pero sus planes se vieron alterados al descubrir el 3 de noviembre nuevas islas en Las Antillas: como las islas La Deseada, Marigalante, Guadalupe, etc., topándose con el archipiélago de Las Islas Vírgenes, así como Puerto Rico.

Cuadro del desembarco de Colón pintado al óleo por el artista John Vanderlyn en 1847.

El 22 de noviembre llega a La Española encontrando El Fuerte Navidad arrasado con sus hombres muertos. El almirante busca otro emplazamiento más seguro de proteger navegando por el este de la costa, y el 6 de enero de 1494 se decide por construir un nuevo fuerte que se llamaría Isabella (llamado en honor a la reina Isabel I de Castilla). En el mes de febrero Colón manda una flota hacia España para que los Reyes católicos ordene el envío de suministros y el dinero de pago de los marineros.
El 17 de marzo se funda la Fortaleza de Santo Tomás en el interior de la isla, y se crea el primer cabildo y ayuntamiento de América presidido por su hermano Diego Colón. En otra expedición marina se descubre la isla de Jamaica, y se trazan mapas de la costa Sur de Cuba. Los problemas por no llegar víveres y suministros siguen, y se forman rebeliones y saqueos con robos en las propiedades indias, y abusando de sus mujeres. 
A finales de 1494 regresa parte de la flota enviada a España con los suministros y refuerzos, y las vuelve a enviar con un cargamento de esclavos. En enero de 1495 los reyes al tener pocas noticias del Almirante y sus hombres, unido a la circulación de ciertos rumores preocupantes sobre sus modos de conducirse en aquellos dominios, deciden enviar con la flota a un investigador, Juan de Aguado, para que comprobase e informase de cómo marchaban las cosas por los territorios gobernados por Colón. 
Mientras, se continuaba sucediéndose conflictos con los indígenas que desembocaron en guerrillas. En una de ellas se logra capturar a su cabecilla Caonabo, cual había sido responsable de la matanza del primer fuerte. Excepto uno de los jefes de las cinco tribus de la isla, los restantes deciden formar una alianza y atacar conjuntamente a los colonos y rescatar a Canoabo (desconociendo que ya había muerto durante el viaje hacia España). El fiel Guacanagari, único jefe cacique que no se unió a la alianza, alertó al Fuerte y Colón preparó una emboscada en la selva saldándose la batalla con la victoria española, y con este paso, lo ayudó a amansar al resto del territorio isleño. Fue un factor importante el potencial del armamento de los españoles que equipado con sus arcabuces con ballestas, a los que había que añadir el caballo, y acompañados con feroces perros presa. Sin duda, infundieron el temor entre las filas indígenas que desembocó en una huida en estampida. La refriega se sucedió en mayo de 1495 siendo llamada Batalla de la Vega Real, o Santo Cerro, y terminada en la zona llamada Vega Real se funda la fortaleza llamada La Concepción de la Vega, que con el tiempo se convertiría en una de las zonas mineras de oro más rica del Caribe. El alcaide de la Fortaleza fue Miquel Ballester, que paso a la fama por ser el primero en crear el primer ingenio azucarero en Santo Domingo.

Como curiosidad decir que Colón, seguidor de eruditos pensadores como Ptolomeo y Aristóteles, llevaba consigo una tabla que indicaba los principales eventos astronómicos, y quedó señalado en su cuaderno de bitácora de viaje, un eclipse lunar que se produjo del 14 al 15 de septiembre en la isla de La Española, y comparando las horas de comienzo y fin con las registradas en Cádiz, los cálculos reafirmaron la teoría extendida de que la Tierra era esférica. 
El 10 de marzo Colón torna el viaje de regreso, llegando al puerto de Cádiz el 11 de junio de 1496. El viaje de retorno lo compuso dos embarcaciones: La Niña, donde viajaba Colón, y La India o Sta. Cruz, cual fue el primer barco que se construyó en Las Indias.

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