El ojo turco (Nazar Boncuk) se emplea para proteger contra este maleficio, ya que según la creencia los malos sentimientos que se hallan en el interior del ser humano salen a través de los ojos. El objetivo es mirar fijamente detrás el mundo para mantenerlo seguro del daño contra el mal de ojo, protegiendo de la negatividad y las malas vibraciones, como la envidia o malos sentimientos que a veces se lanzan por otras personas inconscientemente, siendo dirigido hacia el amuleto absorbiéndola. Sus raíces se remontan a la Babilonia, en donde se han hallado en sepulcros sumerios, así como en el Antiguo Egipto, y en el Imperio hitita.
En Turquía y países desérticos cercanos, el color más malvado es el azul porque recuerda al agua fresca, significado de que las cosas prosperen y crezcan, en referencia a que sin ella las cosas se marchitan y perecen. Otras leyendas afirman que se remontaba a las primeras migraciones e invasiones nórdicas donde en estos predominan los ojos azules, y se llegó a la creencia de que los ojos azules producían el mal de ojo.
En la fe judía el rojo se asocia a la suerte y la buena fortuna, así que también el ojo de fondo rojo también es muy popular.
Los hititas cuyo origen se desconoce tuvo su mayor esplendor hacia el siglo XVI a. C. En el año 1900 a. C. invadieron la región de Asia menor y la primera ciudad que establecieron fue Nesa, cerca de la actual Kayseri en Turquía. En el 1800 a, C. conquistaron Hatusa, y entre 1680-1650 a. C. su líder Labana Hitita fundó el Reino Hitita conquistando toda Anatolia (Turquía) Central, y extendiendo sus dominios por el Mar Mediterráneo, rivalizando con el Antiguo Egipto.
En Grecia, Turquía, y parte de Asia Central como la China occidental los efectos del ojo malvado son muy temidos, por lo que este amuleto es uno de los artículos mas comunes de la decoración en los hogares, o en automóviles, así como en forma de pulseras, pendientes, o colgantes. Se usa de escudo ante sentimientos envidiosos atrayentes de la maldad, como por ejemplo cuando a un bebé otra persona le lanza el llamado Nazar, contenido en una frase sin malicia: ¡Qué niño más hermoso! Para que la protección del amuleto sea efectiva, y evitar el maleficio se debe decir: Mashallah, nazar deymesin , o Nazar etme ne colur, calis senin de olur (traducido como: No le pegues el Mal de Ojo).
Otro amuleto de similar tradición al Ojo Turco, es La Mano de Fátima (Jamsa); talismán de uso protector contra la desgracia en general y particularmente el temido Mal de Ojo. Su origen se remonta a la Antigüedad, se cuenta que recibe el nombre de Mano de Fátima en alusión a Fátima az-Zahra, hija de Mahoma, y a veces Ojo de Fátima, debido a que algunas versiones del símbolo incluyen un ojo.
Los judíos, por su parte, con frecuencia lo llaman Mano de Miriam -hermana de Moisés y Aarón-, o Mano cinco. Los musulmanes a menudo establecen una relación entre los cinco dedos de la mano y los cinco pilares del Islam, mientras que los judíos hacen lo propio con los cinco libros de la Torá. Típicamente se emplea en forma de colgantes, o pendientes… Se coloca en puertas de casas, en coches, etc. En relación con las supersticiones en occidente y su simbología numerológicamente, el más común y conocido en Occidente es el nº 13 relacionado al mal augurio, la mala suerte. El miedo irracional a este número se define como Triscaidecafobia (del griego). En contraposición con el nº 12 símbolo de la perfección (en la mitología griega los dioses sumaban 12), y unido a lo positivo. El 13 guarda relaciones negativas siendo la más popular con el hecho que fueron 13 personas en La Última cena de Jesús (incluido Él mismo). Además de coincidir en un viernes la crucificación del Mesías. En el Cábala –disciplina esotérica del judaísmo–, enumera la existencia de 13 espíritus malignos. También proviene de la mitología vikinga, ya que Loki sería el nº 13, un dios malvado de la mala suerte, las mentiras, y el caos (La maldad), que se suele presentar como el invitado nº 13. Al llegar el cristianismo lo definió como Satán, el 13º ángel.
El actor Tom Hiddleston interpretando a Loki, en un fotograma de la película de superhéroes de la franquicia Marvel, Thor.
Así como el
nº 666 que en el simbolismo cristiano es el nº de
La Bestia, originario de los textos bíblicos del
Apocalipsis, según San Juan, ligado al
Anticristo.
En Extremo Oriente, el número maldito es el 4, en japonés se pronuncia shi, para muerte y se pronuncia igual que el 4, y para remediarlo lo pronuncian como yon. El 42 (shi-ni) es sinónimo también de mal augurio, su significado es prepararse para morir, por ello en algunos hospitales no existe esta habitación. Tampoco en otros hospitales de maternidad no existe el nº 43 (shi-san), que se pronuncia como parto muerto. Como vemos, en el país del Sol Naciente existen muchas palabras, truculentas, con doble significado.
En Italia debido a la influencia del antiguo y poderoso Imperio Romano el nº 17 tiene simbología negativa debido a que se escribe XVII. Reordenando las letras se transcribe VIXI, que en latín significa: “Mi vida es pasado”.
La palabra amuleto viene del latín “Amuletum”, que significa transporte, y de la creencia de que ciertos objetos místicos pueden prevenir de daños y males. Las podemos encontrar en forma de pulseras o collares, aunque los más usuales son los rosarios o cruces, muy empleados en los hogares. Famosa es la Cruz de San Benito, de creencia protectora contra lo maligno, aunque existe gran variedad de cruces como la Caravaca, que se emplea para curar, aliviar dolencias, y liberar de hechizos. En el judaísmo se emplea la Estrella de David como símbolo de protección, sus cinco estrellas se conjugan para proteger de los malos espíritus. La cruz esvástica es un amuleto de poder y de protección. La palabra esvástica proviene del sánscrito svastika, que significa buena fortuna, o bienestar. Tiene tradición hinduista de positivismo, y es símbolo sagrado para muchas culturas orientales, aunque su origen se ha llegado a relacionar con la cultura del Antiguo Egipto, en simbiosis con la energía solar, siempre considerada portadora de buena energía. De los egipcios se conoce también la cruz egipcia, ansada (El ankh), llamada Llave de la Vida, de creencia protectora y símbolo de vida y sabiduría. Otra cruz popular es la escandinava el martillo de Thor, cuyo fin es protector y también de empleo de unión del matrimonio.
Las estampas de santos o figuras se usan frecuentemente en los hogares cristianos para demandar salud al arcángel San Rafael, Santa Lucía, o San Pantaleón, este último llamado el que se compadece de todos. Fue un mártir cristiano de origen turco que fue médico. También para cuestiones de salud se suele rezar al venezolano Doctor José Gregorio, o al santo italiano San Francisco de Asís.
Para la demanda de protección contra las malas energías tenemos al arcángel San Miguel, San Jorge contra la mala suerte, y San Expedito, para afrontar problemas inesperados y poder solucionarlos.
Para el amor nos hallamos al fraile portugués venerado San Antonio de Padua, y San Patricio, misionero cristiano y patrón de Irlanda. Y como no, el mártir San Valentín, patrón por excelencia de los enamorados.
Un santo muy recurrido para cuestiones materiales de buena fortuna en los hogares es San Pacracio, llamado El que la sostiene. Mártir ciudadano de la antigua Roma que se convirtió al cristianismo, y por ello fue decapitado según se dice con tan sólo con 14 años. Para que de suerte la leyenda dice que debe ser regalado, y ponerle ramitas de perejil colgando o sobre su imagen. También se debe colocar una moneda sobre su mano indicativa y siempre mirando de puerta hacia dentro del hogar.
Otro santo recurrido es San Cristóbal, y que suele ser un colgante muy habitual entre los viajeros para que sirva de seguridad en el camino.
Otros símbolos mágicos de atracción de buena suerte son las herraduras, asociadas con la nobleza de los caballos que con su trabajo portaban fortuna a los hogares. Por ello se emplea en las puertas de las viviendas: Si las cuelgas con las puntas hacia abajo viene a significar que el que cruzara la puerta de entrada dejaba fuera todo lo negativo. Si la colgabas al contrario con las puntas hacia arriba, sirve para retener la buena suerte. Al ser de metal también aleja el mal de ojo. La tradición dice que debemos encontrarla de manera casual, o en forma de regalo para que funcione.
La creencia del búho y lechuzas, es además de atraer la suerte, alejar el mal de ojo y la envidia. Los amuletos de origen animal provienen de tiempos inmemoriales y fueron de los más frecuentados por su mimetismo con la naturaleza. Entre los que otorga suerte uno de los más populares de uso occidental es la Pata de Conejo, siendo una de las supersticiones más antiguas. Como el elefante de tradición hindú, que surge de la leyenda de Ganesha, -el dios con cabeza de elefante-, fruto del dios Siva y la diosa Parvati. Se distinguía por ser muy obediente a las órdenes que le daban sus superiores y profesaba un gran amor a su madre. Guardián de la casa. “El que abre los caminos y aleja los obstáculos”. Debe colocarse en los hogares con la trompa hacia arriba y hacia dentro del hogar que se emplea para alargar la vida y prosperidad. Según dicen, son portadores de la buena suerte, atraen la sabiduría y aleja las envidias. Es también para ello, la fertilidad, el uso del amuleto de la rana, o la del escarabajo, que este último además previene de las enfermedades y alarga la vida.
El Gato de la Suerte (Maneki-Neko), se supone que da buena suerte al propietario. Su origen pudiera estar en Japón, cuenta la leyenda que un sacerdote pobre de Tokio vivía con un gato en un templo. Un día, una tormenta que azotaba la región obligó a un hombre rico a refugiarse bajo un árbol cerca del lugar. Entonces vio a un gato que con su patita lo invitaba a pasar. El hombre, extrañado, fue hacia el animal y en ese momento cayó un rayo en el árbol que se había cobijado. Desde entonces, ni al monje ni al gato le faltó nada. El mensaje que transmite la figura del gato con la pata levantada es: “Entra. Eres bienvenido”. Según sus colores el verde significa seguridad en el hogar, el azul que tus sueños se cumplirán, el rojo garantiza el amor, el negro es para evitar la mala suerte, el rosa para ayudarte a encontrar tu media naranja, y si es amarillo, te asegura éxito en los negocios (dinero).
El Dragón es un animal místico en Oriente, ha sido empleado como amuleto contra la infelicidad, pero sobre todo para luchar contra la esterilidad, proporcionar la vida y fertilidad. En definitiva para el amor, tanto en modo de talismán como en tatuaje. En los países árabes debido a que son mayoritariamente musulmanes, no incluyen figuras de animales y personas, limitándose a diseños florales o geométricos. Son conocidas como las pinturas Alheñas, o Arjeñas. Es una tinta naranja rojiza que se cree que proporciona protección mágica.
En la cultura oriental también se emplean variedades de Budas. El Buda gordo de la Suerte, o Buda feliz (Ho Tei o Bu Dai), conocido también con el nombre de Pha, cual se identifica por ir cargado de un fardo o bolsos (abundancia) y portando un abanico mágico llamado oogi, que cumple deseos. El abanico tiene su origen en las disposiciones del emperador que concedía las peticiones del pueblo utilizando el abanico. No hay que confundirlo con Sidharta Gautama, el Buda, cual era delgado, atlético y se mantenía en óptimo estado físico, mental y espiritual. Bu Dai parece ser que fue un monje budista durante la dinastía Liang. Era carismático, siempre sonreía, y de carácter bondadoso. Las formas redondeadas, esféricas, es como el chi o energía de la prosperidad, circula por los ambientes en donde se coloquen porque según la creencia las formas circulares no hace posible que las aristas, espinas o puntas que hieren nos alcance. La gran barriga simboliza la felicidad, suerte y plenitud. Es considerado uno de los dioses de la suerte en varios países de Asia. Es tradicional rascarle la barriga a Bu Dai, con lo que se sentirá más feliz y la suerte nos favorecerá debido a la felicidad del Buda.
También es de usual esotérica creencia hallarlos en figuritas conjuntas llamados: Los Seis Budas Felices son las diferentes representaciones del Maitreiya Buda. Debido a que el número seis multiplica el simbolismo de cada Buda Feliz individual.
1. Simboliza a la Felicidad, se representa sentado con una bola en la mano derecha.
2. Referido a la Salud, representado con sombrero.
3. Símbolo de la Fortuna/Dinero, con un cesto con bola en sus manos, alzadas sobre la cabeza.
4. A la Suerte, con una bola en su mano izquierda alzada y cuenco con bola en su mano derecha.
5. A la Esperanza, con una bolsa en la espalda y un abanico en su mano.
6. En el Viaje, con una bolsa en la espalda y calabaza-agua en su mano. Otorga suerte para emprender un viaje.
Un amuleto recurrente para los hogares son las Pirámides, aunque su uso es contradictorio en lo referido al tipo de energía que canaliza, destacando que está relacionada con la Muerte por su uso representativo como tumbas para los faraones y mayas. Pero la opinión más generalizada es que atraen beneficios saludables por su atracción y captura de las energías positivas que luego es irradiada por sus vértices Se emplean mucho en los dormitorios por sus poderes que le atribuyen mágicos en cuanto a la sexualidad, o de efecto sedante. Las podemos encontrar en diferentes colores según las canalizaciones de energía cósmica se creen transportan: En rojo aumenta la vitalidad y la salud. El naranja está relacionado con la alegría. El amarillo se emplea para mejorar la creatividad, la memoria. El color azul para la paz, intuición, mejorar el ánimo. El violeta para la inspiración. El rosado evita el estrés, induce al sueño. El marrón es para la fertilidad. Y el color verde para el equilibrio. Espiritualmente, las pirámides de cristal pueden ser un punto de foco para la meditación o una herramienta motivadora para el éxito. Para que surtan efecto las pirámides deben recibir luz directa ambiental o del Sol.
La energía que se halla en el interior de las pirámides ha constatado algunos investigadores la existencia de algún poder desconocido que atenúa la descomposición natural orgánica. Pruebas hechas en la Gran Pirámide de Keops (o de Guiza), depositando por ejemplo, carne, observando su nivel de putrefacción de la misma, se comprobó que se endurecía hasta quedar en una especie de momificación sin llegar a pudrirse…
Otros amuletos famosos típicos del Antiguo Egipto empleados como talismanes fueron los escarabajos que simbolizaban la resurrección. Éstos se emplean a modo de protección contra la energía negativa, trasmitiendo vitalidad. Otros fueron las figuras Sekhmet o Sejmet, la diosa leona de la mitológica egipcia, de enorme poder, y protectora de los faraones. Sus talismanes se asegura que desprende además, energías de curación. Aunque generalmente su uso se destina en los hogares a modo de protección contra las malas intenciones de ajenos.
Pirámide de Maslow.
Volviendo a la figura tetraédrica de la Pirámide, simbólicamente puede representar la estructura de una sociedad u organismo, donde en la parte superior o en el vértice es ocupado por pocos y son muchos los que se encuentran en la parte inferior o en la base. Un ejemplo de representación piramidal es la postulación hacia 1943 por Abraham Maslow, un psicólogo estadounidense que en su obra Una teoría sobre la motivación humana, propone una pirámide de cinco niveles de jerarquía de necesidades.
Religiones o sectas controvertidas como la francmasonería de Los Illuminate, también lo portan con una simbología jerárquico espiritual, que se representa por un gran ojo en la cabeza de la pirámide en relación al Ojo de Dios, llamado Ojo de Providence, y que en el Antiguo Egipto representaba a Horus, el Dios Sol, quien simbolizaba el poder absoluto. Símbolo que inunda la cultura social norteamericana como por ejemplo el Dollar Americano, que fue introducido por el presidente masón Franklin D. Roosevelt, en el año 1935.
Como reseña curiosa monumentos tan relevantes como son La Estatua de la Libertad en New York (EEUU), y La Torre Eiffel de Paris (Francia) tienen componentes simbólicos francmasones.
La estatua de la Libertad situada en un islote al sur de la isla de Manhattan, fue un regalo donado por los franceses hacia 1885 para conmemorar La Declaración de la Independencia de los EEUU y para afianzar los lazos de amistad entre ambas naciones. La estatua fue obra del escultor francés Frédéric Auguste Bartholdi, que según parece era francmasón. La ideología Masónica e Illuminati bebe mucho de la cultura del Antiguo Egipto, y Bartholdi fue un apasionado de Egipto en donde había incluso trabajado en el proyecto del Canal de Suez, y por tanto existe la creencia de que para la creación de la estatua se inspiró en la propia diosa Isis, cual a su vez se relaciona con el demonio del cristianismo Lucifer -el portador de la luz-, y personaje simbólico de la logia Illuminate, generador del conocimiento y la equivalencia del poder. Aunque sincréticamente tomó como referencia última a la antigua diosa romana del siglo V a. C. Libertas -deidad de la libertad y la esperanza-, y que según el mito del origen a su culto se remonta a la diosa Babilónica Ishtar.
La Torre Eiffel con sus 300 m. de hierro forjado situada a orillas del río Sena en Paris también fue obra de un ingeniero masón Gustave Eiffel hacia 1889, en conmemoración del centenario de La Revolución Francesa. Aunque no estuvo sólo en la empresa y fue ayudado por otros diseñadores los ingenieros Maurice Koechlin y Émile Nouguier, intercambiando ideas. Su estética también comparte las simbologías masónicas del Antiguo Egipto en la forma piramidal de su base y orientación. Añadir también que en Francia existe una versión en pequeño de la estatua de la libertad en bronce que sirvió de modelo para construir la original hecha de material de cobre.
En cuanto a referencia en simbología esotérica de la cultura canaria, a destacar el Ídolo de Tara, considerada por los aborígenes como La Diosa de la Fertilidad; símbolo de fertilidad y de suerte. Hallado en Gran Canaria de época pre-hispánica. La figura representa al cuerpo de una mujer hecho en arcilla.