Director: Alexandre Aja.
Año 2008.
La cinta cumple con todos los requisitos clásicos del género de terror, mantiene la tensión y el suspense, aunque eso sí, no tiene un gran guión ni pasará a los avales de la historia, pero sirve de entretenimiento para una noche de fin de semana. De hecho su director no se rompió la cabeza en crear un producto original puesto que estamos ante un remake de una película surcoreana llamada Geoul sokeuro (El otro lado del espejo), dirigida por Kim Seong-ho en 2003. Sabemos que el cine de terror oriental está de moda.
El actor Kiefer Sutherland no se aparta mucho de sus interpretaciones que tanto hemos visto en la serie 24 horas y sigue en la misma línea en el papel de un policía, aunque más bien ahora es ex-policía derivado por sus problemas con el alcohol, agudizándose sus problemas con la ayuda de su ex-mujer, que es una completa borde integral. Aún así, consigue que lo contraten para trabajar de vigilante de seguridad en un antiguo centro comercial que se halla en estado ruinoso por un incendio, y bueno, no vamos a hacer más spolier. En definitiva, creo que a los amantes del terror el film no os defraude...
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