domingo, 16 de noviembre de 2008

El desierto de Sal Uyuni (Bolivia)



El desierto o mar de sal Uyuni, en Bolivia, es una inmensa planicie estéril sin vida de alrededor de 12.000 Km 2,  blanca como la nieve pero que cuando saltas del coche es sólida como el granito. Se formó hará miles de años cuando un gigantesco lago salado se evaporó. Las montañas lejanas con las cumbres perpetuas nevadas de los Andes, se reflejan como espejos en simbiosis con la atmósfera, engañando a la vista con su proximidad por el exceso de refracción.


De día hace temperaturas bochornosas y durante la noche, debido a la altitud con respecto al nivel del mar de casi 4000 metros, heladas de -20ºC. Bolivia es un país de contrastes: desde regiones selváticas, a volcanes como el de Licancabur  de 5.920 m. que se eleva a orillas de la Laguna Verde, y que en un día con viento, forman olas que arrastra los minerales del agua extendiendo un verde luminoso, y de ahí su curiosa denominación. Al suroeste de Bolivia se encuentra el desierto de Siloli, uno de los más secos del mundo, con sus curiosas formas rocosas, y que es una parte del gran desierto de Atacama. También allí se halla el Parque del Salar de Uyuni  ocupando una superficie de 10.582 km 2, donde aguardan cercanos, pero distantes por los traicioneros reflejos, los centenarios y gigantescos cactus. En donde la distancia a consecuencia del vapor por el calor intenso, parece curvar el horizonte creando un peculiar paraje dimensional irreal.

  Desierto de Siloli.
Sus espectaculares cactus, y el volcán Licancabur con su Laguna Verde.
En el lugar puede hallarse a nivel mundial la mayor reserva natural de Litio, por lo que las marcas multinacionales como la Mitsubishi  el grupo industrial francés Bolleré, se hallan interesadas. De hecho se ha empezado a construir una planta piloto para la industrialización, y el actual presidente boliviano Evo Morales, concedió al proyecto su visto bueno, para explotar el producto final, el carbonato de Litio, derivado de la sal, y que convierte al Salar de Uyuni en un filón de oro, más con la llegada de la nueva era de revolución industrial, llamada tecnología limpia, en donde el litio es vital para las baterías de motores eléctricos, la informática, etc.

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